Materiales: Es evidente que hay distintos tipos de materiales, desde telas sintéticas a tejidos naturales. Por supuesto, el material va a influir en el precio del sillón, así como su comodidad dependiendo del grosor y la suavidad de los tejidos.
El cuero es un material de buena calidad pero que puede encarecer el precio final.
En general, muchos sillones se fabrican en piel o polipiel. Conviene saber que la polipiel con el paso del tiempo se cuartea y que algunos sillones pueden llevar un tratamiento para evitarlo.
Además tanto la polipiel como el viilo, nal rozarse, pueden hacer ruidos desagradables y la piel no es un material muy transpirable, lo que puede ser un problema en verano.
También hay que recordar que los sofás y sillones suelen rozarse bastante con el uso, ensuciándose más que otros muebles, y puede ser aconsejable que sea desenfundable para facilitar su limpieza habitual.